Opeth: The Last Will and Testament

opeth-the-last-will-and-testament-lanzamientos-metal-noticias-sin-categoria

 

Opeth: The Last Will and Testament

Por: Eleazar Trejo

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Pasaron 5 años para que Opeth volviera con una nueva entrega. Pasaron 5 años para darnos cuenta que esta banda es la idea (ejecución) de una sola persona que necesita refrescarse y reinventarse todo el tiempo.

 

Sí, Opeth volvió con el mejor disco de los últimos 4 que ha editado, ya que tardaron 14 años para alcanzar lo más alto de esta nueva etapa. Sí, la etapa del grupo de rock/metal progresivo que llevamos escuchando estos años.

 

¿Estabas esperando a Opeth del Watershed para abajo? Este no es disco para ti. ¿Sigues enojado porque Watershed fue lo último “rescatable” de la banda? De nuevo, esto no es para ti.

 

¿Que significa The Last Will and Testament para esta maravillosa banda? La muestra perfecta de lo que Opeth lleva intentando alcanzar desde hace más de 10 años. Puro y auténtico rock progresivo de la más alta calidad.

 

Y es así que el disco abre con §1, la cual resume perfectamente lo que será todo este disco. Una base rítmica poderosa, voces limpias y guturales, riffs y solos poderosos, cambios de ritmo sorprendentes; básicamente, una ejecución perfecta de principio a fin.

 

opeth-the-last-will-and-testament-lanzamientos-metal-noticias-sin-categoria

 

§2 y §3 aparecen con la intensión de que uno vaya calentando los motores a lo que será un viaje a la mente rockera, metalera, progresiva y psicodélica de Mikael y compañía. Adicionalmente, hay que reconocer el extraordinario trabajo en los teclados y ambientación que hace Joakim Svalberg. Sobresaliente, sin duda alguna.

 

Pasando estos dos temas, llega el mejor momento del disco (y posiblemente, de los últimos 14 años) a cargo de §4, §5, §6y §7. A lo largo de 27 minutos, Opeth nos muestra por qué son (y jamás dejarán de ser) una de las bandas más profesionales del orbe en todos los sentidos. Virtuosismo puro y duro por donde lo veas. Cambios de ritmo por doquier, que van del rock al metal en ida y vuelta, solos de guitarra finos y desenfrenados, voces limpias y guturales impecables, una base rítmica, en el bajo y la batería, majestuosa, y si no es suficiente, una oleada de coros que entran y salen para que el escucha quede maravillado. ¡Sublime! ¡Excelso! ¡Espléndido! (Matricula de honor para §6. Por favor, escúchala con muchísima atención).

 

Y después de este tremendo viaje, el disco cierra con A Story Never Told, una pieza que no podría ser mejor para ponerle broche de oro a esta joya. Un deroche de finura ciento por ciento.

 

Un dato a reconocer es la frescura e impacto que le dio Waltteri Väyrynen en la batería y percusiones a la banda. Sin menospreciar a Martin Axenrot, lo mejor que ha tenido la banda en los tambores estos últimos años. ¡Un monstruo!

 

 

Por último, durante los últimos años, Opeth ha sido una banda ultra criticada. Se les reprochó un cambio tan radical de estilo. Se les recriminó la falta de agallas, musical y vocalmente hablando, pero hoy, el tiempo le dio la razón. Hoy, podemos afirmar que Opeth llegó a la meta que se trazó hace más de 14 años. La cúspide del rock/metal progresivo al que querían llegar.

 

Opeth: The Last Will and Testament
10/10

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.